De vez en cuando

Algunas veces, como estas de las cuales voy a hablarles ahora, las leyes de la física se ensañan con uno: las cosas se caen, se rompen, se mueren, se queman, se deterioran en fracciones que exceden al tiempo estimado de trasmisión de datos entre neuronas y no alcanzamos a comprender del todo qué esta sucediendo... La fuerza de gravedad, pasa de ser algo normal y mayoritario de la experiencia diaria, a una cuestión realmente de gravedad
Días atrás, los pasé intentando hacer un anillo, engarzar una gema... Era esa gema y ese anillo el que tenía que ser. Pero no salió y me frustré. O por el cúmulo de situaciones que precedían a ese momento, estaba frustrada y por eso no salió. O la circulación era doble mano...

Algunas veces, la fuerza de aquello que pugna por adsorbernos, es tan intensa que desorienta. Nos asalta distraídos y sorprende... pero con el sabor del viejo conocido. "Esto ya pasó".
En esos días fue que espontáneamente, y sin advertir la relación de ésto con mis ánimos, escribí la versión "remake" de Caperusita Roja y el Lobo. Una versión sin tragedia. La moraleja de que "las bestias" (el lobo, o la oscuridad interna que todos albergamos en algún discreto apartado) muchas veces nos sacan del "sendero" para vernos mejor. Mas que villanos, son guías; mas que ajenos, son parte de nuestra naturaleza intrínseca.

En fin... una mañana de apatía, de resignación a intentos fallidos, abrí mi caja de bocetos y encontré unas figuras cortadas en metal, ya hacia tiempo. Un poco retándome a mi misma a salir del claustro mental al cual me había sometido, busqué piedras para acompañarlas -y decir que las busqué es un simple decir imprudente de mi parte; ya sabemos bien que las piedras "nos buscan" y no al revés...- y sencillamente me rendí... a la plasticidad obtusa del metal, que no era otra que la propia. Limé aristas, ardió mi cara con el calor del soplete en una jornada no menos ardiente de verano y, por último, engarcé los citrinos en su sitio, a la hora en que el sol se pone en el horizonte y mundo parece brillar triunfal. Así de simple, como son los tiempos naturales; como siguiendo el ritmo. Levanté la mirada de mi banco y todo estaba bien ya... las cosas marchaban de nuevo.

- alpaca - citrino - 



...de vez en cuando esta bien dejarse comer hasta los huesos por la bestia...
me dije.

Tengan ustedes un hermoso rodar de ciclos, al paso de seis patas.Y ahora...
 música

12 comentarios

  1. Muy lindos. A mi me paso algo parecido el lunes con mis cuadernos de dibujo. No me salia absolutamente nada, se me caen todos los pinceles detras del escritorio y me da ganas de gritar. En ese momento me doy cuenta que no era mi dia. Claramente cuando las cosas no salen hay que dejar descansar la cabeza.
    Muy lindas creaciones..como siempre :)

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    1. Si Anne! Pero a veces cuesta caer en cuenta de eso, no? Por lo menos a mi me pasa que la fuerza por dar a luz esa idea es muy fuerte y me empecino. Estoy trabajando en el concepto de la dirección de la fuerza y su contraparte de reposo... :)

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  2. Mirá si será curiosa la vida que, en ocasiones, lo mejor que se puede hacer es no hacer nada... simplemente, dejar fluir. Y las cosas llegan solitas... cuando es el momento, y cuando tienen que llegar. Mientras tanto, hay que vivir el "mientras tanto" y seguir viviendo. No te das una idea de cuánto me encuentro a mí misma en este post... ;o)
    Hablando de curiosidades, ¿cómo es eso de que las piedras nos buscan y no al revés?
    Besos!

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    1. Si, es mas, yo me animaría a decir que la vida siempre se desenvuelve sola. Tal vez con los años aprendo soltar un poco mas el volante. Respecto a las piedras, esto es algo del imaginario colectivo de quienes amamos las gemas creo yo... y como todo aquello en lo que uno "cree", toma parte en la realidad tangible. Según lo que vivas, la piedra que elijas (te llegue, te regalen, encuentres) puede tener la energía que estés necesitando, lo sepas o no; es a veces una lectura del inconsciente también, como podría ser el tarot, con la diferencia que una gema actúa a un nivel mas sutil que el pensamiento. Esto, o estoy comenzando con un delirio místico, no se, lo dejo a tu criterio :-P Besos!

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    2. jeje ningún delirio místico! (y, si lo es, en todo caso es un delirio muy lindo). Voy a ver qué gemas me trae la vida (porque "piedras" ya me trajo bastantes...). Hermoso tu trabajo, esos lobos están llenísimos de fuerza y vitalidad. Beso grande y gracias por responder!

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  3. hermosos anillos!!! valieron la pena una buena masticada ;).
    hablando de piedras, es verdad y me lo dijeron de que las piedras te buscan, me vine con un par de amigas nuevas y entiendo que me voy a hacer de un millón de amigos más como siga la cosa así. Encontré un cuarzo (encontré dije), el mio, estoy feliz. Debe ser algún poder universal trastocado, yo hace dos días que ando igual, como colapsada mentalmente, pero como dice Automne, me obligo a seguir, esperando a que fluya...ya se avecinan tiempos de cambio.....bué!! me zarpe escribiendo :D ♥

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    1. Así es amiga, necesita estar oscuro para que comience a aclarar. Son purgas también, no? Y una pizca de nuestra mala costumbre humana de resistirnos al movimiento: el REAL, el que viene de adentro, el que no se controla y las vicisitudes que hacen crecer. Pongo la pava y seguimos por mail :) ♥

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  4. Me gusta mucho tu trabajo. Y coincido en que hay personas y situaciones que a veces nos traban pero que si nos relajamos y dejamos que nuestra esencia fluya obtenemos maravillas.
    Ahora bien, como hago para encontrarme con un anillo o pulsera tuyos?

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    1. Muchas gracias! Perdón, ya me habías preguntado antes y se me paso de vista contestarte! Si queres escribirme a mielimenta@gmail.com, te cuento como trabajo ;) Besos!

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  5. soy una convencida de que las cosas se dan cuando se tienen que dar...!!!!

    una preciosura Meli!!!

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  6. Que hermosos Meli!
    cuando volvieron del valle? como fue ese retorno?
    te mando un abrazo!
    Ana

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  7. cuanta intensidad ! y es asi...SIEMPRE! hay que dejarse llevar por el movimiento, no hay que resistirse al "que fluya" ...btw, el anillo es lo mas!

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© SubliMeli
Maira Gall