Joyas del equinoccio -y anuncio de nuevos tiempos-

Si pudiéramos elevarnos y alejarnos de la Tierra, mirarla en perspectiva y trazar una línea imaginaria, veríamos que en un equinoccio ambos hemisferios se encuentran a la misma distancia del sol.

Entonces podíamos decir que el día del equinoccio, hay un momento en que aun no es ni primavera ni otoño propiamente dichos. Un momento de escasa duración en que la luz se posa con equidad sobre el planeta. Como una mariposa, con sus dos alas abiertas.

Este equinoccio otoñal, intenté ver mas allá de mi habitual visión, elevarme por sobre mi propia vivencia de copas de árboles ocre y carmín, y descubrí que en otoño hay tantas mariposas como en primavera. 

En un viaje fantástico intenté dejar de ser pequeña y alejarme de la tierra que piso. Entonces fui grande y me elevé sobre la Tierra que abrazo; con un brazo primavera, con el otro otoño. Volé con mis alas, una de plata, otra de bronce. En ese instante de puro presente te deseé un feliz equinoccio.

PLATA
BRONCE

Es una época de cambios, de muda de pelaje, de gamas de color, y entre las muchas cosas en las que trabajo con emoción para esta nueva etapa, y con estas dos piezas como estandarte, tengo la alegría de invitarte a la inauguración de mi tienda online, que puedes visitar en un click!

Espero ansiosa tus comentarios, sugerencias, tu "hola! estuve allí!" ; aun tengo que trabajar en ella así es nada me pondría mas contenta que hacerlo bien acompañada... como siempre que estas ahí.