Conocer las sierras

Vacaciones al fin...

Nos fuimos a las sierras cordobesas, a Villa Yacanto, por recomendación de mi amiga Alita que ya había estado allí. Déjenme decirles que descubrimos una faceta de Córdoba que no hubiéramos imaginado. Como enamorados eternos de la montaña, creyentes de haber encontrado nuestro lugar en el mundo al pie de la magnifica cordillera de los Andes, con sus paisajes imponentes, no esperábamos sentirnos tan encantados en este nuevo destino. 

Nos hospedamos en un complejo de cabañas camino al cerro Los Linderos. La experiencia sobrepaso las expectativas que llevábamos (que eran muchas, creanme). Boris instauro la idea de "la casa de vacaciones" tras los últimos viajes y 'escapadas', en el imaginario familiar, para referirse a todos y cualquiera de las casas en las que nos hospedamos. Esta casa de vacaciones que adoptamos temporalmente estos últimos días fue muy disfrutada por los tres. Y las caminatas en los sinuosos senderos boscosos, la recolección de zarzamoras, frutillas y duraznos creciendo al natural en los caminos, los mates contemplando las maravillosas vistas por donde miráramos, cada inspiración de ese aire serrano saturado de peperina y eucalipto, las mañanas de río y tardes de pileta -que emplazada en la ladera del cerro nada tenia que envidiarle al río-, los paseos en camioneta por los valles... fueron algunas formas de agradecer la acogedora estadía.