"Quien desee investigar la medicina, deberá proceder así: considerará, en primer lugar, las estaciones del año, y luego el efecto que produce cada una de ellas".
-Hipócrates-
Hace muchos muchos años pienso en las estaciones como fases de un proceso más amplio. La medicina china sostiene que la única constante es el cambio, por lo cual vivimos en una adaptación continua. Para ello es necesario mantener un diálogo sostenido entre la naturaleza interna y externa que nos conforman, lo que nos viene dado por el contexto y lo que en nosotros suscita. En primavera crece, en verano madura, en otoño se cosecha, en invierno se guarda. Todo ésto lo traduzco en un permanente aprendizaje de mí misma.
Para empezar, empecemos por donde estamos: VERANO.
Ohhh! El verano y su desbordante luz!
En cada una de sus expresiones invita a la extroversión. Pero enero: qué calor...!
Encontré en un libro de Byung-Chul Han el término "estivación", que por cierto no recuerdo haberlo escuchado antes, y me vino como anillo al dedo para nombrar un proceso que aunque antagónico a la hibernación, en la forma de quietud que tomó la rutina diaria, se le parecía tanto.
Muchas veces me encontré en un gesto tan introvertido como en invierno.
Adopté un ritmo de vida frugal, de actividad en la mañana temprana, para luego encontrar remanso en en mi labor tranquila de planificación anual de SubliMeli, leer, o simplemente contemplar la luz del sol pasearse por toda la casa y atravesar los cristales y llenarla de arcoiris, hasta su hora dorada, hora de salir por fin, regar las aromáticas y poner pies en el césped fresco.
Para un vaso
jugo de 1 limón
5 partes de infusión liviana de stevia
2 partes de agua de mar (ya rebajada)
No sé si será porque lo extraño tanto y tengo ganas de volver a verlo, pero este verano descubrí los beneficios del agua de mar. Entre otras cosas para mantenerse hidratado frente a las altas temperaturas, pueden prepararse con ella bebidas isotónicas naturales con jugos de frutas. Yo la incorporé a mi hábito de limonada diaria.
*Se vende filtrada y envasada. Se puede comprar por internet. Hay que rebajarla con agua; en casa la tenemos preparada en botellones de 2ltrs para tomarla durante el día.
La frescura del limón fue aliada en mantener mi mente despierta para llevar adelante la planificación anual de trabajo en SubliMeli. Es la primera vez que hice una planificación de orden creativo, es decir, le asigné un tiempo de desarrollo y realización a algunas ideas que tengo ganas de llevar adelante, para que no queden otro año más en borrador.
No fue un trabajo que haya surgido así como así este verano. Fue fruto de una intención que sembré el verano pasado, que no sin dificultad entendí que debía hacer crecer con ayuda de nuevos recursos de los cuales no disponía en ese momento, pero que impulsada por el entusiasmo mismo de ese crecimiento fui buscando y encontrando, muy a pesar del yermo invierno de la incertidumbre. Y finalmente floreció.
Si bien mi relato siempre fue inspirado tácitamente por las estaciones, este año mis piezas serán en sí mismas un relato estacional. Estoy muy emocionada y ansiosa por mostrarles!
...pero tomaré como ejemplo la cualidad propia del verano y dejaré que los frutos maduren a su tiempo :)
Compensé este tranquilo pero intenso trabajo con momentos de ensoñada lectura. Mis elegidos para el verano fueron estos:
Y eso fue enero en toda su esencia.
A pesar del limbo de calor, inspiré la luz, como si pudiera guardar algo de ella dentro mío para cuando lleguen las sombras otra vez. De esa inspiración exhalé estas piezas, en las que el espectro luminoso se ofrece en todo su esplendor...
plata 925 y cristal
plata 925 y cristal
Y este collar, que no es nuevo, pero qué bien le sienta la luz del verano...!
collar "varita"plata 925 y zafiro
Luego llegó febrero, con su brisa fresca y balsámica, que predispone a otro tipo de disfrute. Estos días que susurran otoñar, son el preámbulo a la manifestación de los frutos interiores que maduraron en nosotros gracias a la luz y el calor de todas nuestras vivencias estivales, frutos que cosecharemos en el Verano Tardío. Pero eso te lo contaré más adelante, mientras tanto, todavía nos quedan tres cuartos lunares de verano por delante.
;)
Nos vemos en la siguiente estación
Con amor,
Meli
♡
En un enero caluroso (julio para esta parte del mundo) veo más inspirador tu rutina que la extroversión. Es maravilloso leerte en esta época mía de "guardar"
ResponderEliminarY que vivan los veranos tardíos! Un abrazo
Amiga! Me alegro tanto sintonizarnos aún estando en los opuestos! Creo que ese es un gran aprendizaje, que se nos da en principio con "un otro" para después hacerlo parte de uno, no? Te quiero!
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